Recuperar la Capital: el deseo incumplido de Jorge Sobisch

Desde hace 40 años, el MPN gobierna Neuquen en base a una estrategia muy simple: sostener un difuso perfil ideológico pragmático-oportunista asentado en la apropiación y repartija de los recursos naturales, entre sus adictos, (generalmente provenientes de otras provincias que rápidamente compran “la defensa de nuestros recursos”).
Un pragmatismo que los hizo: Alfonsinistas, Menemistas, Aliancistas, Duhaldistas, Kichneristas, tal vez la próxima “Cobistas” o del que venga.
Esta estrategia se completa induciendo a la división del la oposición en dos o tres partidos nacionales, mientras ellos conservan el 40 % propio, los demás dividimos el resto.
En el MPN los blancos, amarillos, sapagistas, sobischistas, etc, van mutando de color manteniendo siempre la mezcla de intereses, negocios, odios y temores.
Desde el 2003, la unión PJ-UCR en las elecciones municipales, nos permitió iniciar el desplazamiento del MPN de los principales municipios. Pero hasta hoy fue imposible lograr esa convergencia a nivel provincial.
La trampa en la que caíamos esta sostenida con entusiasmo desde este lado, por tres sectores “los principistas” , “los vivos”, y los “que se la creen”
Los “principistas” que buscan reivindicar las diferencias ideológicas con los demás y prefieren que gane el MPN antes de “contaminarse” con sus vecinos de infortunio.
“Los vivos” que tentados por las mieles del poder provincial, y aparecen en cada elección, financiados por el MPN, siempre con una buena excusa de enojo para traicionar a los suyos.
Ya varias veces vimos a “los vivos” y “los principistas” mezclados, fue el caso de el frente UNE-Podesta-Tom Romero. Donde el último (que no cataloga de “principista”) terminó de funcionario de Jorge Sapag.
Y “los que se la creen” son los que alentados por algún triunfo de todos, lo toman como propio y juegan a convertirse en los Jorge Sobisch del futuro.
Ahora estamos frente a una nueva elección, la de Concejales del 23 de agosto; la disyuntiva vuelve a ser la misma. El MPN contabilizando un 46 % de su última elección a Intendente, disputando contra Farizano que dispersa su caudal en tres listas.

Otra vez no pudimos juntar a todos, y el Juntos x la Ciudad de Farizano, tiene de competencia a dos de sus propios funcionarios. Uno que juega siempre de rebelde sin causa y otro que con dinero apuesta a un proyecto individualista que va…no se sabe adonde.
Es posible que la dispersión de votos, favorezca al MPN y se queden con mayoría en el Concejo Deliberante abriendo una puerta peligrosa a la caída anticipada del gobierno de Farizano.
De todos modos aquellos que aspiramos a construir en Neuquen una sociedad mas justa, mas abierta, y más democrática, seguimos apostando a la búsqueda de las coincidencias por encima de los intereses individuales. Perón nos enseñó (y no todos lo aprendimos bien) “primero la Patria, después el Movimiento y por último los hombres; esto que es casi una frase de almanaque viejo, esconde un profunda enseñanza: los hombres de la política no debemos anteponer el interés individual o de facción por encima de los intereses del conjunto.
En síntesis; el 23 de Agosto estamos ante un nuevo momento de decisión, o respaldamos a la lista de Darío y Marta y seguimos adelante con un Neuquen distinto o dispersamos los votos y como desea Jorge Sobisch, “le devolvemos la Capital al MPN.”